Resum
Este artículo examina el estatuto epistemológico de la bisexualidad en América
del Norte desde mediados del siglo 20. Se argumenta que el estado de los bisexuales y
la bisexualidad sigue siendo marginal debido a su capacidad para desestabilizar un
orden monosexual. Valiéndose de las investigaciones de Alfred Kinsey para anclar la
discusión, el autor demuestra que el rechazo persistente de la bisexualidad como una
categoría de identidad sexual (y como una perspectiva crítica) actúa para contener la
crisis de la identidad que persigue a la supuesta naturalidad de las privilegiadas dos
posiciones del sujeto: la homosexualidad y la heterosexualidad. También se muestra
cómo ese mismo orden es confirmado por el epistemológico y la prohibición del
material de las personas intersexuales.