Resum
La infección por el virus del papiloma humano (VPH) es la enfermedad de transmisión sexual más frecuente hoy día en todo el mundo. Los VPH de alto riesgo (VPH 16 y 18) están relacionados con el desarrollo de cáncer cervicouterino, una de las principales causas de mortalidad a nivel mundial; mientras que los de bajo riesgo (VPH 6 y 11) son los causantes del 92 % de los casos de verrugas anogenitales, además de provocar papilomatosis respiratoria recurrente y otros tipos de cáncer menos frecuentes. Por estas razones ha sido necesaria la implementación de vacunas contra los tipos más frecuentes de VPH, tanto de alto como de bajo riesgo. Estas vacunas están compuestas por partículas semejantes a virus (PSV), formadas por la proteína L1 de la cápsida viral, pero sus precios elevados las hacen inaccesibles para países en desarrollo, donde la incidencia de la infección es mayor. Para lograr una mayor cobertura de la vacunación contra el VPH y lograr llevarla hasta las poblaciones de menores ingresos, se desarrollan diferentes estrategias para la obtención de PSV, estas incluyen la expresión de la proteína L1 en levaduras y bacterias, entre otros. En Cuba no existe suficiente información sobre la prevalencia e incidencia de la infección con VPH 6 y 11, sin embargo los pocos estudios disponibles sugieren una amplia distribución en la población tanto femenina como masculina desde edades tempranas, por lo que se hace necesaria la implementación de la vacuna contra VPH en el esquema nacional de vacunación. El objetivo de este trabajo es brindar elementos que sustentan el desarrollo de candidatos vacunales contra la infección de los VPH 6 y 11, así como las estrategias abordadas para ello.