Resumen
En la prisión de Pamplona, capital de Navarra, Comunidad Autónoma situada al norte de España, alrededor del 35% de los internos han tenido o tienen problemas relacionados con el uso de drogas por vía intravenosa. Las Administraciones Penitenciarias responsables de la asistencia sanitaria a los presos, deben garantizar el derecho a la salud de los internos en similares condiciones a las de población general y esto incluye la implementación de programas de reducción del daño como son los programas de intercambio de jeringuillas (PIJ). En noviembre de 1998, se inició un programa piloto de intercambio de jeringuillas (PIJ) en la prisión que continúa en la actualidad. Diferentes instituciones han participado en su elaboración, implementación, coordinación y evaluación. El intercambio en el PIJ de Pamplona es de tipo personalizado, es decir, lo realiza un profesional, lo que ofrece la posibilidad de realizar intervención sanitaria.
En 7 años de funcionamiento del PIJ no han existido incidentes reseñables, ni con los usuarios ni con los trabajadores del Centro. El programa ha alcanzado un porcentaje de devoluciones del 93% y es utilizado por el 40% de los VIH positivos. No se ha detectado aumento del consumo de droga inyectada, ha desaparecido el uso de jeringas ilegales y no se ha documentado ningún caso de sero-conversión frente al VIH o al VHC. El seguimiento continuo del programa, así como la opinión de los usuarios y del personal trabajador del Centro se consideran los factores clave para el éxito del mismo. (Resumen extraído del artículo)