Resumen
El movimiento por los derechos en el trabajo sexual está protagonizado por mujeres que ejercen la prostitución y se reivindican como sujeto político. Dada la importancia creciente que adquieren las redes sociales como medio fundamental de difusión de ideas, el discurso es una de sus herramientas más poderosas. Un estudio etnográfico de sus mensajes revela el protagonismo y la potencia del uso de la palabra "puta" como estrategia para sobreponerse y afrontar el estigma social que recae sobre el colectivo y todas aquellas mujeres que transgreden las normas de control de la sexualidad. Las conclusiones de este estudio apuntan a la necesidad de prestar atención desde las Ciencias Sociales a esta cuestión, puesto que puede ayudar a comprender algunas claves relativas a la profundidad de los retos que afronta este tipo de activismo.