Resum
Ante la recepción normativa y la implementación de políticas públicas
tendientes a la legalización del aborto, sectores conservadores, principalmente
religiosos, arbitran diversas estrategias que obstaculizan su acceso. En el
terreno de la salud sexual y (no) reproductiva, la objeción de conciencia juega
un papel trascendental, con especial incorporación en los ordenamientos
jurídicos. En la medida que la objeción sanitaria sea ejercida ante casos
de aborto como un mecanismo de control y disciplinamiento de sectores
de poder sobre los cuerpos de las personas gestantes, nos obliga a revisarla
contextualizada en el tiempo y relaciones de fuerza en las que está inmersa.
De esta manera, un análisis jurídico de los casos de Argentina y Uruguay
permite observar cómo la figura es susceptible de implementarse con la
finalidad de obstaculizar los avances legales en cuanto al derecho al aborto.