Resum
Este estudio ha sido posible gracias a una ayuda de la Universitat Jaume I para el desarrollo del proyecto de investigación P1·1B2015-82. El cibersexo se ha convertido en una actividad frecuente entre nuestros adolescentes y jóvenes. Nuestro objetivo es analizar la existencia de cambios en el consumo de cibersexo entre los 16 y 25 años. Se evaluó a 1352 adolescentes entre 16-25 años (Media = 20.6 años, DT = 2.5) de los que el 46.2% eran hombres. Esta muestra forma parte de un estudio nacional a través de una plataforma online difundida por Facebook. Entre las chicas, un 77% utiliza internet con fines sexuales (a los 16 años el 90%). No hubo diferencias significativas entre las edades en el cuestionario de adicción al cibersexo (ISST), con medias entre 3.93 (24 años) y 6.47 (18 años), dentro del límite de un consumo recreativo. Entre los chicos, un 98.2% utilizan internet con fines sexuales (a los 16 años el 93.3%). Tampoco hubo diferencias entre las edades en el ISST, con medias entre 7.57 a los 20 años y 9.27 a los 23 años, en el límite entre un consumo recreativo y de riesgo. Entre los chicos heterosexuales, a los 18 años ya el 100% han utilizado internet con fines sexuales, pero a los 16 años el porcentaje es del 87.5%. El porcentaje de los mayores que utilizan el ordenador es el doble (88.9%) que a los 16 años y al revés ocurre con el móvil. Se observan diferencias en la edad en la búsqueda de pareja sexual, dándose un importante incremento a los 17 años, al igual que en la búsqueda de pornografía y en el uso de páginas de contactos. Resulta necesario realizar más investigaciones para conocer cuáles de los cambios en el patrón de uso del cibersexo en diferentes edades pueden tener que ver con los cambios evolutivos en el desarrollo de la sexualidad de cada individuo y cuáles otros pueden ser generacionales.