Resum
Introducción: El trabajo sexual es una ocupación que se encuentra inmersa en un universo de mitos y estigmas sociales, que contribuye a que sea vista y entendida dependiendo de cada referente del ser humano influyendo inevitablemente la cosmovisión pues siempre y a través de la historia de la humanidad desde los comienzos de la humanidad ha sido un trabajo relacionado con condiciones sociales deprimidas. En Colombia la población de trabajadoras sexuales ejerce este trabajo en diferentes lugares destinados para tal fin como: bares, prostíbulos, casas de citas, la calle generalmente de manera clandestina siendo también utilizado el cyber sexo. Ellas se encuentran expuestas a infinidad de factores de riesgo, ya que las condiciones laborales en la mayoría de los casos no cuenta ni cumple con los debidos controles para garantizar: seguridad, salud y calidad de vida en el “empleo” o ejercicio de su labor. Por definición, consiste en la venta de servicios sexuales a cambio de dinero u otro tipo de retribución. Realizar este tipo de labor exige habilidad, experticia y aprendizaje para el manejo y trato del cliente, control de sus emociones y evitar aquellas acciones que puedan conducir al riesgo de enfermar y morir. Esto indudablemente las coloca como un grupo de alta vulnerabilidad para contraer infecciones de transmisión sexual (ITS), afectaciones a su salud mental, violación de sus derechos incluyendo el maltrato físico y verbal, abuso sexual y explotación, entre otros. Objetivos: Identificar el conocimiento y prácticas de autocuidado en las trabajadoras sexuales del municipio de Palmira en el año 2015. Metodología: Estudio de tipo descriptivo de enfoque cuantitativo. Se indagó sobre los conocimientos y prácticas de autocuidado para dar respuesta a la pregunta de investigación. Resultados: En cuanto a la caracterización sociodemográfica, el 64% de las las trabajadoras sexuales del municipio de Palmira estaban en el rango de edad entre los 18-23 años, la escolaridad evidenció que la mayoría no concluyó el bachillerato 47%, (14 mujeres). En la variable estado civil el 67% (20 mujeres) correspondió a mujeres solteras, el 77%(23 mujeres) que no conviven con su pareja. El estrato socioeconómico el 74%(22 mujeres) pertenecen a los estratos 2 y 3, seguido del 20%(6 trabajadoras) pertenecen al estrato 1. Régimen de seguridad social, la mayoría el 83% (25 mujeres) pertenecen al subsidiado. Vivienda la mayoría el 67%(20 mujeres) pagan alquiler y su situación laboral es preocupante ya que la totalidad de la población que conformó la muestra, 30 trabajadoras sexuales, ninguna cuenta con contrato laboral ni contribuyen a un fondo de pensiones, por lo tanto, no se podrán pensionar y deberán ejercer su profesión permanentemente. Autocuidado El 67%(20 mujeres) tiene claro el concepto de autocuidado ya que los resultados mostraron que la gran mayoría tienen buenas prácticas de higiene. Sin embargo, frente al autocuidado 93%(27) no hacen actividad física. Actividad sexual el gran número de las trabajadoras sexuales 83%(25 mujeres) tiene un promedio de 1 a 5 hombres al día. El 73%(22 mujeres) lo hacen bajo efectos del alcohol o usan sustancias psicoactivas. En la investigación tuvo en cuenta sus prácticas de autocuidado corporal, también su estado de salud mental donde los datos muestran que el 10% (3 mujeres) han estado hospitalizadas, o han recibido tratamiento para trastornos mentales y el 53% (16 mujeres) de la muestra estudiada han presentado sentimientos de tristeza o depresión. Enfermería, como disciplina promover en los colectivos humanos, el uso de prácticas que generen un estilo de vida saludable. Los resultados de esta investigación permitieron a los sectores públicos y privados, como la USC Seccional Palmira y la Secretaria de Salud Pública del Municipio, revisar estrategias de intervención oportuna y necesarias para mejorar la calidad de vida de las trabajadoras sexuales, su entorno y su familia, impactando en los objetivos de las políticas públicas.